Certeza
Lo ví. Fuego y recuerdo. Complicidad en una taza de café, en el cigarrillo que él ha abandonado y yo retomo en su ausencia. Horas de charla bajo su mirada que es todo, incluso dulce. Su olor. Mis pasos largos y su baile. Canciones y celos arbitrarios, seguidos por una serenidad nocturna y solitaria.
Sobre todo, la certeza de que nunca seremos.
3 comentarios:
...con tu prosa me hiciste vivir el momento, aunque creo que en el pasado pasé por algo similar...
Lo peor de las certezas es que se rien en tu cara :(
maldiTas!
J@z, bienvenida... estas historias son más comunes de lo que una quisiera.
Completamente de acuerdo Nuez, las muy bastardas...
Publicar un comentario